Aldenburgh presentó su Musicircus, en el centenario del compositor
El establishment musical acoge al fin a John Cage, el iconoclasta
Jessica Duchen
The Independent
Periódico La Jornada
Martes 26 de junio de 2012, p. 5
Martes 26 de junio de 2012, p. 5
Londres. Lo han llamado el mayor iconoclasta de la
música, pero, ¿acaso John Cage, al llegar al año de su centenario,
pasará a ser un músico de la corriente dominante? El Musicircus
del compositor se presentó la noche del viernes pasado en el Festival
de Aldenburgh; más adelante en el verano, toda una noche en los Proms
estará dedicada a sus obras. Sin embargo, Cage (1912-1992), que toda su
vida luchó por sobrevivir, habría visto con incredulidad este sesgo del
destino. Su perspectiva de las cosas no podría ser más distinta de la
de Benjamin Britten, en cuyo territorio se fundó Aldenburgh.
No son sus pianos preparados, sus cactos punteados y sus silencios lo
que inquietó al establishment; más que nada, fue la forma en la cual
incorporó en su música la noción del azar, eliminando el ego del creador
y haciendo elecciones mediante el I Ching.
Musicircus no es un concierto, sino una
En Aldenburgh, el ensamble Exaudi y el artística sónico Bill Thomson prometieron
© The Independent
Traducción: Jorge Anaya
ocurrencia: tantos ejecutantes como sea posible al mismo tiempo, en un área parecida a un gran hangar.
No oirán nada: oirán todo, explicó Cage alguna vez, con la esperanza de que los asistentes
captaran el júbilo del espíritu anárquico.
En Aldenburgh, el ensamble Exaudi y el artística sónico Bill Thomson prometieron
abrir las puertas de par en par y dejar salir la corriente de sonido.
© The Independent
Traducción: Jorge Anaya
Aucun commentaire:
Enregistrer un commentaire